El ultrajo de Goya

Como han podido notar en los últimos días, el medio artístico bogotano está un poco agitado. Inauguraciones van y vienen. La crítica no se deja esperar y muchas veces no quedan vivos artistas, sus obras y la burocracia directiva artística. Y, para volver aún más interesante todo, el reciente robo del grabado de Goya "Tristes presentimientos de lo que ha de acontecer” de la exposición “Los desastres de la Guerra” que actualmente está abierta en la Fundación Gilberto Alzate Avendaño. Recibí (y creo que todos los colombianos, recibimos) con mucha tristeza la noticia… En los primeros días lo consideré como una vergüenza mundial: permitir que tan fácilmente desapareciera una obra tan significativa y representativa, además de un valor incalculable, era algo para que los colombianos metiéramos la cabeza en la tierra.

Grabado desaparecido de Goya "Tristes presentimientos de lo que ha de acontecer”

Los días fueron pasando y la grandiosa policía bogotana, con sus típicos operativos fantoches (en cabeza del parlanchín Samuel Moreno Rojas, que se la pasa más en televisión, cocteles y eventos de “alta alcurnia” en total contradicción a la supuesta idea socialista que el desquebrajado Polo Democrático quiere vender a una estúpida población), daba alentadoras noticias de pistas contundentes y anunciaba que muy pronto se iban a conocer los autores del delito. Por otro lado, la más burócrata Ana María Alzate directora de la Fundación, con cara de cordero degollado suplicaba “por favor devuélvalo, esto es una pena muy grande para Bogotá”. A ella le salió el tiro por la culata, montó tan fausta exposición para posiblemente intentar mejorar su imagen ante todo el medio artístico colombiano, pero desafortunadamente se le perdió uno de los cuadritos. Déjenme les cuento en breves palabras la historia de esta señora y del por qué de su mala imagen: fue designada a dedo para el cargo que está ocupando, sin tener mérito alguno y poco conocimiento artístico, eso sí es una gran burócrata con supuestamente muy buenos contactos. Su nombramiento puso de cabeza a todo el medio cultural en Bogotá y Colombia.

De pronto, el viernes pasado me llega un mail de Esfera Pública titulado “Goya,tu grabado vuelve a la lucha”. Se los copio tal cual para ver qué se les mueve en las entrañas con semejante suceso. Yo quedé completamente pasmado y la vergüenza que me embriagaba transmutó casi en un orgullo patrio.

Goya, tu grabado vuelve a la lucha. La lucha de Goya continúa, Goya no ha muerto. Su grabado rompe las telarañas del museo y se lanza a los combates del presente. Pasa a nuestras manos. A las manos del arte libre de políticos y apunta ahora contra la imagen de todos esos burocratas explotadores del pueblo. Contra los amos nacionales y extranjeros. Contra ellos que lo encerraron en los museos enmoheciéndolo. Los que deformaron las ideas de Goya. Los que nos llamarán anarquistas, puristas, maleducados, sinvergüenzas, aventureros,terroristas, bandoleros. Y es que para ellos este reencuentro de Goya con su audiencia es un ultraje, un crimen. Y es que para ellos su grabado libertador en nuestras manos es un peligro. Goya no está con ellos —los oportunistas— sino con los oportunos. Por eso su grabado pasa a nuestras manos. A las manos de la audiencia que no va a cócteles, que no paga la boleta que cobra la Fundación Gilberto Alzate Avendaño por ver la exposición (¿por qué el lucro? ¿acaso no es una institución pública?). Y unido a las luchas de la audiencia del arte no descansará hasta lograr la independencia del delfinazgo de los Alzate y los Moreno, esta vez total y definitiva… por eso es necesario que ahora, como hace dos siglos, los colombianos veamos el grabado con que Goya retrato la estupidez española heredada por los criollos ilustrados que solo se liberaron de los chapetones para guardarse sus tierras y títulos pero que juraron de inmediato lealtad ante el Rey de España (y que al menos tuvieron la engañosa suerte de morir como próceres de la Patria). Sin distingos de ninguna especie invitamos a la audiencia a que nos lancemos a recorrer los caminos de "Los desastres de la Guerra", en lucha por la segunda y completa independencia. Interpretamos al arte cuando recuperamos el grabado de Goya. el grabado "Tristes presentimientos de lo que ha de acontecer" constituye un símbolo que vale más que cien derechos de petición y mil tutelas. Por eso nuestra primera acción consistió en ponerla a circular en manos de la audiencia que lucha por la libertad del arte y quitársela de las manos de estos viles oportunistas y fantoches disfrazados de ilustrados y mecenas: Old Masters Art Brokers y Abad Land Fine Art, la Casa Museo Goya de Fuendetodos, la Diputación de Zaragoza (España), el Alcalde Mayor de Bogotá, la Secretaria de Cultura, Recreación y Deporte y Ana María Alzate, directora de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño.

¡Con la audiencia, con la imagen y sin poder! ¡Presente, presente, presente!

Comando Arte Libre S-11


¡Que forma tan pura y contestaría para protestar por todo lo que está pasando en la Fundación Gilberto Alzate Avendaño, en el medio artístico colombiano, en el ámbito cultural mediático colombiano! ¡Qué manera de exigir la libertad cultural ocultada por la política, la burocracia y costumbres snob culísimas! Yo creo que, en el momento de enterarse de tan magnánimo suceso, la Sra. Alzate se debió atorar con alguno de los pasabocas y el sorbo de champagne con el que lo estaba pasando, en alguna inauguración de otra presumida exposición en la capital. Hubiera querido ver la cara de toda la burocracia cultural del país!

Ojalá esta zarandeada haga despertar al medio cultural, a la burocracia y a la política para que abra los ojos y deje de ser una maquinaria tan excluyente y excluida y que permita ser un medio masivo y un motor de desarrollo y educación, como lo es en otras latitudes. Ojalá la idea del Comando Arte Libre S-11 llegue a un final feliz!

Burócratas y políticos en la inauguración de la exposición. ¿Dónde están los artistas, los profesores, los que saben realmente del tema?

Montaje del Comando Arte Libre S-11, en la obra desaparecida. Samuel no debe notar la diferencia...

Notas al Pie

- Me he divertido mucho con este asunto, les cuento otra breve historia que tuvo una relación curiosa con la exposición de Goya. En la inauguración el restaurante Fish Market (exclusivísimo de la capital) montó todo el evento y repartió una delicia de pasabocas marinos. La organizadora del evento (con la que tuve contacto días antes y después de la inauguración) quería darle su “toque artístico” a los platos y se le ocurrió la grandiosa idea de ponerle maticas, helechos y florecitas. Yo creo que Goya se revolvía en su tumba. ¿Si ven cómo es nada consecuente el medio? Estar comiendo sushi en una exposición de Goya, seguramente los invitados se quedaron no a contemplar los cuadros sino a comer los pasabocas, el alcalde fue solo para aparecer en los medios y la Sra. Alzate, con copa en mano, quería demostrar que pudo montar la grandiosa exposición en su Fundación, robándole el puesto al Museo Nacional y al Banco de la República (pero como les dije le salió el tiro por la culata). Ja!

- La noticia en El Tiempo del domingo 14 de Septiembre de 2008.